¿Cuántas veces vimos en las noticias: “lugareños saquean la carga volcada”? Hace unos días volvió a mi cabeza cuando un camión, que venía siendo monitoreado por nuestro centro de operaciones, volcó mientras circulaba por la ruta nacional 7. Inmediatamente recordé todas las cosas que uno ve y escucha ante estos eventos, pero nada nos amedrentó, por el contrario, desde el primer minuto sabíamos que era una buena oportunidad para demostrar a propios y externos que “no estaba todo perdido”.
En primer lugar, una vez confirmado el vuelco, enviamos asistencia médica para el conductor, el cual afortunadamente solo sufrió lesiones leves. En paralelo irradiamos la alerta a los puestos policiales más cercanos y desplegamos personal propio a la zona del evento. Ya gestionada la atención médica del conductor, nos quedaba lo segundo más importante: “el estado de la carga”. La primera noticia fue desalentadora: la mercadería estaba a la vista, una parte desparramada en la calzada y algunas personas ya estaban “curioseando”. En minutos logramos contacto con el comisario de la jurisdicción correspondiente, quien aseguró presencia policial luego del pago de un adicional, pero con una advertencia inquietante: “si vienen más de 30 personas yo ya no puedo hacer nada, ¡apúrense! ”.
El asegurado, a quien ya se le había informado la situación, no disponía de gente para cargar la mercadería en otra unidad, ni tampoco la empresa de transporte ya que estaban a más de 700 km. de distancia y sin otra unidad para enviar a la zona del evento. Con la premura que ameritaba la situación, contactamos al asegurado con un transporte de nuestra confianza en la zona, quienes en cuestión de minutos se pusieron de acuerdo para que la asistencia estuviera en camino de manera inmediata. Pasadas unas pocas horas del vuelco, mientras la policía tenía acordonada el área con patrullas dispuestas disuasoriamente y nuestro personal grabando a los “curiosos”, llegó el camión con 4 personas, logrando en apenas 1 hora cargar el 100% de la mercadería volcada. Afortunadamente, por su naturaleza,la carga no había sufrido daños como producto del vuelco.
Toda esta situación confirma que: “con pericia y diligencia es posible mitigar el riesgo de saqueo ante vuelcos”. Nosotros ya lo comprobamos y podemos comunicar un mensaje diferente: “El camión volcó, pero la carga está segura”
Por Adrián Granillo Posse (ARM Services)